El vino es una de las bebidas más antiguas y apreciadas de la humanidad. Cada sorbo cuenta una historia de siglos de tradición y perfección en la vinificación. Entre las muchas variedades de uvas utilizadas para producir estos néctares de dioses, el Cabernet Sauvignon se alza como una de las más nobles y veneradas. En este artículo, nos sumergiremos en el fascinante mundo del Cabernet Sauvignon, centrándonos en una de sus representaciones más notables: Santa Rita 120.

Cabernet Sauvignon: La Realeza de las Uvas

El Cabernet Sauvignon es considerado el rey de las uvas tintas. Originaria de la región de Burdeos en Francia, esta variedad ha conquistado el mundo vitivinícola debido a su capacidad para producir vinos de gran estructura y longevidad. Sus vinos son conocidos por su carácter audaz y complejo, con aromas a cassis, moras, pimientos verdes, menta y toques de vainilla y tabaco.

Santa Rita 120: El Encanto de Chile

Santa Rita, una bodega chilena con una rica historia vinícola que se remonta al siglo XIX, ha llevado el arte del Cabernet Sauvignon a nuevas alturas con su vino Santa Rita 120. El nombre “120” es un homenaje a la Revolución de 1814 en Chile, cuando un grupo de patriotas se refugió en las bodegas de Santa Rita para escapar de las fuerzas realistas.

Este Cabernet Sauvignon es un ejemplo impresionante de lo que Chile puede lograr con esta variedad. Producido en el Valle Central, Santa Rita 120 es un vino que combina la elegancia clásica del Cabernet con la riqueza y la intensidad propias de los vinos chilenos.

Notas de Cata

Vista: El Santa Rita 120 Cabernet Sauvignon presenta un atractivo color rojo rubí profundo con reflejos violetas, típicos de esta variedad.

Nariz: En nariz, este vino despliega una paleta aromática cautivadora. Aromas de frutas negras como cassis y ciruela se entrelazan con notas de vainilla y toques de pimiento verde.

Boca: Al paladar, Santa Rita 120 ofrece una experiencia equilibrada y atractiva. Los sabores de frutas maduras se complementan con suaves notas de especias y una estructura tánica bien integrada. El final es largo y persistente.

Maridaje

Este Cabernet Sauvignon es un compañero versátil para una variedad de platos. Va muy bien con carnes a la parrilla, especialmente cortes de res, cordero o cerdo. También es una excelente elección para acompañar quesos maduros y platos con salsas a base de tomate.